Llevo días pensando en todo lo que tengo pendiente de contar por aquí... pero no tengo tiempo. Estoy absorbida, cuando no por obligaciones es por la boda, o por el espíritu de la vagancia que se apodera de mí... no voy a mentir.
Así que hoy, que tampoco tenía tiempo pero un amigo me ha cambiado todos los planes de la mañana, he sacado un ratito para pasarme por aquí...
En estos días me he puesto mala, me he enterado de que una de mis mejores amigas se casa el año que viene, se me ha roto una muela, he llevado el coche al taller por prevención, he conocido al niño de una pareja querida, he tomado café con amigas que viven lejos, he cuidado al niño de unos amigos, se me ha regulado el sintrom... pero lo más importante de todo todo todo: ya tengo traje de novia!!
El hecho en sí la verdad es que me emociona menos de lo que pensaba que me iba a emocionar... lo achaco al montón de cosas que tengo que preparar, tanto de boda como de no boda, que no me dejan disfrutar tanto porque se me va de la cabeza... hasta una amiga y mi hermano se indignaron de que tuviera traje y no hubiera dicho nada! Y a día de hoy, hay gente que si no me ha preguntado yo tampoco lo he contado porque no lo considero tan esencial.
No obstante, cada vez que lo pienso me pongo muy nerviosa, jajaja!! Aunque a la vez me tranquilizo por el muerto que me he quitado de encima... Una cosa menos, de las 146 que quiero organizar...
Todo empezó con problemas, para variar. Por una parte, yo tenía claro que quería que mi vestido sea sorpresa para la mayor parte de la gente, con lo cual opté por ir sólo a la prueba con mi madre y mi hermana, lo mínimo minimísimo. Sé que hubo gente que se quedó con las ganas de venir, y me sabe mal por esas personas, pero es algo que tenía tan claro que no pude ceder.
Por otro lado, pese a lo reducido del grupo, teníamos un problema: mi hermana trabaja en Sevilla entre semana, y yo trabajo casi todos los findes... nos costó un montón de negociaciones y peleas encontrar un puñetero finde que coincidiéramos las dos (yo tuve que hacer un cambio y ella pedirse un día, no había forma) para poder dedicarlo por completo a la "operación vestido".
Pedí cita (con un mes de antelación, qué barbaridad!) en 3 sitios diferentes, 2 en mi ciudad y otro en el pueblo de las novias, que dice todo el mundo que es mucho más barato y que hay de todo. Tenía muy claro que no iba a estar 2 meses mirando vestidos, porque no tenía tiempo ni tampoco ganas. Yo suelo ser muy decidida, o me gusta algo o no me gusta, lo cual venía bien porque mis asesoras tienen poco poder de decisión, jajaja!! Sin embargo, tenía el miedo de que con un vestido de novia y el tipo que tengo, pareciera un buñuelito... preveía el drama y se me quitaban hasta las ganas de pruebas.
La cosa es que llegó el viernes por la tarde y, después de una merienda estupenda (en mi familia somos muy de conmemorar y celebrar grandes momentos comiendo, qué le vamos a hacer) llegamos a nuestro primer sitio y... fue una experiencia genial. Al principio no me veía yo mucho cuando empecé a ver catálogos, pero es como todo, te vas animando animando... y con todo me veía preciosa. Unas cosas me gustaban más y otras menos, pero todo era monísimo. El probador que tenían allí y la chica que me atendió también ayudaban... me lo pasé genial, tanto que cuando iban a cerrar yo me veía horrorosa con mi ropa, jeje!
He llegado a la conclusión de que los vestidos de novia a las chicas es como los trajes de chaqueta a los chicos: no hay hombre feo de traje ni mujer fea de novia. Luego ya hay cosas que te sientan mejor y peor, claro... Yo de allí salí con 2 opciones, lo cual me dejó satisfecha de pensar que, a unas malas de no ver nada más que me gustara, yo ya tenía vestido.
No lloré, que me lo pregunta la gente... y no, yo estaba tan feliz y disfrutando, no me dió emoción... soy así de sosa. A mi madre y a mi hermana si les faltó poquito cuando me vieron con el primer vestido; yo con ése casi lloro también, pero porque no podía respirar... jajaja!!
La siguiente cita fue el sábado por la mañana y, por hacer contraste, fue una experiencia horrorosa. Las mujeres de la tienda con poca gana y educación, criticándome lo que elegía, llamándome gorda unas 25 veces porque ellas tenían vestidos pequeños y muchos no me cabían... tengo una 42-44, tampoco es una talla límite para no tener un vestido de esta talla y que casi todo me estuviera pequeño. De hecho, fue el único sitio que he visto así, vamos. Yo tenía unas ganas horrendas de irme... y a la hora de estar allí, cuando dije que ya no me iba a probar más, la mujer me obsequió con un "no, si ya no te puedes probar más, porque todo lo que tengo a tí te queda pequeño". Gracias, señora. En el fondo, gracias por la experiencia para contar a mis nietos y por lo que nos reímos mi madre, mi hermana y yo después, porque fue alucinante... Menos mal que no fue el primer sitio que vi, porque me hubiera ido a casa con una depresión y sin necesidad.
El lunes me levanté a las 6:30 de la mañana para ir a Córdoba puesto que, después de 12 horas de trabajo dominguero, no se me ocurrió mejor hora para coger cita que las 9:30 de la mañana. Yo y mis cosas... Pero fue un día genial, genial, genial. Nos reímos mucho y lo pasamos muy bien.
Allí encontré mi vestido, después de dudar entre dos, en un lugar que es la perdición para cualquier obsesa de las bodas como yo... lo único que me pone nerviosa es que hasta septiembre no vuelvo a ir... pero,como dice mi hermana, tengo que aprender a aceptar la incertidumbre en mi vida (que no se nota que es psicóloga la tía...).
Lo bueno es que, como decía antes, no pienso demasiado en ello, porque no tengo tiempo... Sigo preparando miles de cosas que quiero hacer aunque no sé si podré... Como me dice el Pequeño, una boda no es una gimkana... pero me gustaría, jajaja!
MADRE MÍA CUANTO HACE QUE NO PASABA A LEERTE QUE NI SABÍA QUE TE CASABAS!
ResponderEliminarY si, lo pongo en mayúsculas xq estoy alucinada. Qué guay!! enhorabuena! y qué bien que tengas el vestido!
muaaaaa
Gracias!!La verdad que tampoco escribí un post en plan ME CASO!! porque todo fue un poco como fue surgiendo... aunque tengo pendiente contar la pedida y demás, que fue sencilla pero la hubo.
EliminarEncantada de nuevo de tenerte por aquí, un besote!!
¡Pero bueno! Es una gran noticia. Lo del traje, no, que también. ¡Que te casas! Pues ahora dime para cuando que ya me he quedado con las ganas jejejejeje ¡Enhorabuena!
ResponderEliminarBesos, muchos
Muchas gracias!! El 29 de Octubre, si Dios quiere. Ya me quedan 7 meses sólo, madre mía!!
EliminarBesotes!!