miércoles, 11 de noviembre de 2015

Motivo 55: Vuelta a la vida normal

El camino está siendo largo y tedioso... pero puede decirse que, aún de baja, empiezo a llevar una vida medianamente normal. Aparte de ver series, bichear por internet, visitar casas de amigos para jugar a juegos de mesa y todas esas cosas que me encanta hacer pero que ya tengo más vistas que el tebeo (hasta de lo bueno se cansa una, oye!) puedo volver a caminar por la calle, hacer algún que otro encargo, fregar los platos y bajar a mi piso a colocar la compra.

Hay días en que estoy más soleada y otros más nubosa... depende de si me da por pensar en lo bien que estoy y lo mal que estaba hace un mes, todo el tiempo libre que puedo aprovechar y las cosas bonitas de la vida, o me decanto por lo lento que avanzo, las recaídas tontas, la de cosas que tengo que hacer y no puedo y lo desgraciaita que soy.


Sorprendentemente para mí y para los que me rodean, suelo decantarme por la primera opción, con lo que todos somos más felices. Las experiencias que no te esperas te cambian, doy fe, y en mi caso está siendo todo más positivo que negativo (aunque no quiero otro trombo, con uno tengo bastante, gracias!).

Además, aunque me siento un poco ruin contando esto, es muy humano consolarse viendo que hay gente muchísimo peor que tú... y esta mañana la vida me lo ha recordado. 

Haciendo hora para pedir mi parte de baja, como cada lunes (en un mes llevo 3 médicos diferentes, pero para criticar a la seguridad social necesitaría 14 post más), como más o menos estamos siempre los mismos a la misma hora, pues ya vas haciendo amistad. Eso, y las abuelillas con ganas de hablar de lo malitas que están, y gente con ganas de ser escuchada, y yo con mi vena marujilla de María en silla a la puerta de su casa tomando el fresco...

La muchacha que estaba sentada a mi izquierda, también para su baja, más o menos de mi edad, iba con su madre, la cual ha estado contando que estaba dada de baja por un principio de esclerosis, que le pinzaba no sé que nervio, y que la dejaba algunos días sin poder andar. Era sorpresa, amanecía cada día e igual ese día andaba normal que no podía levantarse de la cama. No puede pedir la incapacidad, porque con tan pocos años trabajados le quedaba una miseria, pero tampoco está para incorporarse a su trabajo (era profesora o algo así). Y tiene la cita para que le empìecen a poner un tratamiento dentro de 2 meses.

Y luego voy yo y me quejo, porque me han dado la cita para finales de enero... y porque lo más que puede quedarme gracias a Dios son molestias en la pierna durante un tiempo... y me quejo porque llevo mes y medio sin trabajar y quiero volver ya... Es cruel, y triste, pero hay que mirar para abajo muchas veces para darte cuenta de que estás más arriba de lo que creías.

Así que esta semana contenta, porque podría ser mejor, pero también podría ser mucho, mucho peor... Despacito, y con buena letra, nunca mejor dicho.

8 comentarios :

  1. Mucho ánimo guapísima!!!! y siempre positivo nunca negativo. Besines

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    1. La verdad que estoy practicando intensivamente esa máxima en los últimos tiempos, jeje!!
      Gracias por tus ánimos, un besito!

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  2. Yo solo voy a hacer una matización: no digas que ya puedes quejar que luego te toca todos los días y te quejas ;).
    Por lo demás, te leo en la actitud correcta.
    Un beso

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    1. La verdad que sí, que yo soy de queja constante y lo disfruto mucho, jajaja!!
      Pero es bueno recordarse a veces de que me quejo de vicio... ains!
      Besito!

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  3. estar de baja o en casa porque uno está mal no mola nada, a mí siempre que me ha pasado estaba deseando volver a retomar mi vida "normal". experiencias como ésta que te ha tocado vivir te cambian mucho la perspectiva de las cosas y de la vida en general, al menos a mí siempre me ha pasado así. es de las pocas cosas buenas que traen consigo.
    me alegra saber que ya vas mejor y leerte tan animada.
    ánimo que no queda nada ya :)
    un beso

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    1. Totalmente de acuerdo, me ha cambiado la perspectiva de muchísimas cosas... de hecho, aunque no es una cosa buena trombosar una pierna, creo que no hay mal que por bien no venga. Por ahora saco muchas más cosas buenas que malas de lo ocurrido, aunque también lo digo así porque he tenido mucha suerte y esto va viento en popa!! Eso ayuda a olvidar lo malo vivido.
      Un besote y gracias por tu comentario!

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  4. Poco a poco sobre todo no agobiarse!!un beso

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    1. No agobiarse es difícil a veces, pero de momento tengo la suerte de mantenerlo a raya!
      Besos!

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